¿Está preparada la red eléctrica española para el boom de los centros de datos?

“La electricidad es realmente solo un rayo organizado”. – George Carlin

El 28 de abril de 2025, España aprendió qué tan frágil puede ser tal organización. Un repentino y extenso apagón afectó en unos segundos el consumo eléctrico de casi la mitad del país, paralizando el transporte, los servicios y las operaciones digitales. Considerando que es muy probable que España se convierta en el hub de datos líder del Sur de Europa, tal acontecimiento representa un llamado de atención. El acelerado incremento de los centros de datos está llevando a la infraestructura eléctrica a sus límites. En este artículo, exploraremos lo que el apagón revela acerca de las ambiciones digitales de España, las crecientes limitaciones de la red eléctrica y la manera en la que las estrategias con visión a futuro – como la TI circular- pueden ayudar  a encontrar el equilibrio correcto entre la innovación y la resiliencia.

El apagón español: una señal de alerta para la infraestructura digital

El 28 de abril de 2025, España experimentó uno de los mayores apagones en su historia reciente. De acuerdo con la información conocida, el apagón inició aproximadamente a las 12:33, cuando el funcionamiento de tres generadores y la conexión con Francia se interrumpieron repentinamente. Antes de la falla, la red española estaba operando y suministrando 32 giga watts de energía eléctrica, satisfaciendo la demanda de 25 giga watts – con un significativo aporte del 59% en energía solar. En tan solo unos segundos, el suministro de electricidad a lo largo del país se redujo en aproximadamente un 50%, afectando negocios, transportes y servicios digitales.

Aunque aún se investigan las causas técnicas exactas, esta afectación a todo el país sirve como un serio recordatorio de las vulnerabilidades en nuestra economía, cada vez más electrificada y digitalizada. Para los centros de datos y los proveedores de servicios gestionados, tales acontecimientos ponen de relieve el precario equilibrio entre el crecimiento digital y la estabilidad de la infraestructura eléctrica.

El boom español de los centros de datos y la meta de ser un importante hub digital

Hace pocos meses, nosotros destacamos la manera en la que España se ha erigido rápidamente como el nuevo centro neurálgico de los centros de datos en Europa, desafiando el dominio tradicional de Fráncfort, Londres, Ámsterdam y París. Esta transformación es posible gracias a la posición geográfica estratégica de España – que funciona como un puente digital entre Europa, África y América Latina- así como por una sólida infraestructura de fibra óptica y de 5G y un incremento en la demanda de servicios digitales, impulsado por la IA y el internet de las cosas. Gigantes tecnológicos como Amazon, Microsoft y Meta están invirtiendo miles de millones de Euros en los centros de datos españoles -particularmente en regiones como Aragón y Madrid- impulsando de esta forma un crecimiento exponencial de la capacidad y el impacto económico. Se espera que el mercado de los centros de datos en España duplique su valor para 2030. Esto supondrá una presión adicional para un sistema de transporte y distribución eléctrica de por sí ya comprometido – en especial si se consideran las necesidades de energía eléctrica de los centros de datos modernos.

Estado actual de la infraestructura eléctrica española

La red de transmisión de alto voltaje de España, administrada por Red Eléctrica de España (REE), consta de aproximadamente 40,000 km de líneas de transmisión que operan primordialmente a niveles de voltaje de 400 kV y220 kV. El país ha logrado avances excepcionales en el rubro de la integración de las energías renovables las energías renovables suministraron aproximadamente el 56% de la electricidad en España en 2024.

Sin embargo, esta excepcional penetración de las energías renovables viene de la mano con desafíos inherentes. La red eléctrica española muestra una marcada división territorial: las áreas urbanas tienen un alto consumo de electricidad (se incluye aquí a los centros de datos) y a menudo producen poca electricidad, mientras que las regiones remotas generan excedentes de energía eléctrica renovable que deben transmitirse a largas distancias. A pesar del significativo crecimiento en la capacidad de generación energías renovables, la infraestructura de transmisión no ha crecido al mismo ritmo, y esto ha creado cuellos de botella que han provocado una merma del 1% en energías renovables en 2023.

Además, las interconexiones de España con otros países vecinos siguen siendo limitadas. La capacidad de interconexión entre España y Francia es de tan solo 3 giga watts -menos del 3% de la capacidad total-, lo que genera cierta vulnerabilidad cuando ocurren desconexiones inesperadas. La Comisión Europea ha reconocido esta limitante y ha establecido el objetivo de incrementar la capacidad de interconexión a un 15% para el 2030.

Los desafíos de la red eléctrica ante el aumento de centros de datos

El tema de si la red eléctrica española está preparada para el boom de los centros de datos es ciertamente complejo y preocupante. Se presentan varios desafíos importantes:

  1. Infraestructura anticuada que requiere modernización

La anticuada  red eléctrica europea requiere billones de dólares en inversión para lidiar con una creciente producción de energías renovables y una demanda de electricidad en aumento (lo que incluye a los centros de datos). España ha aprobado un plan de inversión a cuatro años para renovar 8,000 km de red existente, construir 2,700 km de nuevas líneas de transmisión y establecer 700 km de interconexiones submarinas, pero los tiempos de implementación podrían no ser acordes con el rápido ritmo de desarrollo de los centros de datos.

  1. Deficiencias en el almacenamiento de energía

España se ha fijado la ambiciosa meta de alcanzar una capacidad de almacenamiento de 22.5 GW para 2030. Sin embargo, en abril de 2025 la capacidad instalada española en sistemas de almacenamiento de energía mediante baterías representa solo 60 MW – mucho menos que la capacidad del Reino Unido o de Italia (5.6 GW y 1.0 GW, respectivamente)-. Esta deficiencia en el almacenamiento limita la capacidad de la red para generar un equilibrio entre el suministro y la demanda  – especialmente en un escenario de alta penetración de fuentes renovables de energía.

  1. Estabilidad de la red con una alta penetración de fuentes renovables

El creciente predominio de los recursos no sincrónicos -como el eólico y el solar- presenta desafíos para la estabilidad de la red. A diferencia de lo que sucede con las plantas de generación de energía eléctrica convencionales, estas fuentes renovables no presentan la misma  inercia rotacional, lo que provoca que el sistema pueda ser más vulnerable a fluctuaciones de frecuencia – que es precisamente el factor que puede desencadenar fallas en cascada, como sucedió en el reciente apagón.

  1. Concentración regional de centros de datos

Madrid aporta el 61% de la capacidad española en centros de datos y esto provoca que la concentración de la demanda de energía eléctrica en áreas geográficas específicas genere una presión adicional sobre la infraestructura eléctrica regional. Esta concentración podría empeorar los cuellos de botella ya existentes en el sistema de transmisión y en los desequilibrios energéticos territoriales.

Soluciones orientadas al futuro

A pesar de estos desafíos, se están realizando esfuerzos importantes para mejorar la sostenibilidad y resiliencia de la red eléctrica.

  1. Mejora en las interconexiones de la red eléctrica

España está fortaleciendo sus conexiones con Francia – un nuevo enlace a través del Golfo de Vizcaya  duplicará la capacidad de interconexión entre ambas naciones. Esta conectividad optimizada representará una mayor resiliencia y flexibilidad en la gestión de flujos de energía eléctrica.

  1. Expansión del sistema de almacenamiento de energía

Aunque por ahora es limitada, se espera que la capacidad española para almacenar energía eléctrica se incremente considerablemente. La Asociación Europea de Almacenamiento de Energía proyecta que la capacidad instalada se sextuplicará en toda Europa para el año 2030, lo que representará una importante capacidad de equilibrio para las redes eléctricas renovables.

  1. Colaboraciones innovadoras en el sector privado

Las empresas están desarrollando soluciones creativas para enfrentar los desafíos energéticos. Solaria, un desarrollador español de energías renovables, ha ingresado al mercado de los centros de datos y ha obtenido autorizaciones de conexión a la red del orden de los 155 MW de capacidad para centros de datos, aprovechando sus activos energéticos existentes. De igual forma, nLighten ha obtenido un contrato de adquisición de energía eléctrica con Shell España para alimentar su centro de datos en Madrid -con recursos solares y eólicos específicos.

  1. Eficiencia energética y crecimiento sostenible para las empresas

Al dar prioridad a las medidas para reducir el consumo de energía – como la implementación de hardware con un consumo eficiente de energía o la optimización de operaciones en el rubro de la TI- los proveedores de servicios gestionados pueden ayudar a aliviar la presión sobre la red eléctrica y, al mismo tiempo, reducir los costos operativos. El aprovechamiento y la reutilización del calor residual proveniente de los centros de datos – un recurso a menudo soslayado- representa otra poderosa oportunidad: esta energía recuperada puede ser redirigida para la calefacción de edificios aledaños o para brindar soporte a la industria local, transformando un subproducto en un activo valioso para las comunidades y el medio ambiente.

Y, más importante, la adopción de soluciones circulares de TI – como la que ofrecemos en Ynvolve, en la que el equipo es reacondicionado, reutilizado y reciclado, extendiendo de esta forma los ciclos de vida útil del hardware y disminuyendo drásticamente los costos generados por residuos electrónicos, reduciendo de esta forma las necesidades de extracción de nuevos recursos-. De manera conjunta, estas estrategias permiten a los proveedores de servicios gestionados respaldar la expansión constante de la economía digital española sin comprometer la estabilidad o sostenibilidad de la red eléctrica, garantizando que el progreso tecnológico no vaya en detrimento de la resiliencia medio ambiental.

Conclusión

La meta española de convertirse en el hub digital del Sur de Europa tiene el respaldo de inversiones importantes, ventajas geográficas y abundantes recursos en energías renovables. Sin embargo, el apagón de abril de 2025 sirve como recordatorio de que la infraestructura digital es tan resiliente como la red eléctrica que la alimenta.

No se trata tanto de ralentizar el progreso, sino de tomar decisiones más inteligentes a medida que vamos avanzando. Deben integrarse a la ecuación factores como mejores interconexiones, mayor capacidad de almacenamiento local mediante baterías y un uso responsable de la energía. Para las empresas, también es un recordatorio de que la construcción de una resiliencia digital significa ver más allá de velocidades o magnitudes. Soluciones como la TI circular, el reacondicionamiento y la reutilización de lo que ya está en funcionamiento no solo son positivas para el medio ambiente: son prácticas, rentables y reducen la dependencia de sistemas comprometidos, disminuyendo de esta manera la necesidad de fabricar nuevos productos así como el uso de recursos necesarios para la eliminación responsable de activos de TI.

El apagón nos ha enseñado que no podemos ignorar los límites de nuestra infraestructura. Con las herramientas correctas y con un enfoque mejor cimentado, podemos seguir creciendo sin perder de vista los factores que mantienen todo en funcionamiento. ¡Póngase en contacto con nosotros para obtener orientación y asesoría sobre soluciones circulares y crecimiento responsable y construyamos juntos un futuro sostenible!